Preguntas Frecuentes

Un grabador láser es una máquina que utiliza un haz láser concentrado para grabar o cortar materiales. Es capaz de crear diseños precisos en diversos materiales como madera, acrílico, cuero y más.

Los grabadores láser pueden trabajar con una amplia variedad de materiales, incluyendo madera, acrílico, cuero, papel, cartón, algunos metales (dependiendo del tipo de láser), vidrio y más. Sin embargo, algunos materiales como PVC o materiales que contengan cloro no deben grabarse por razones de seguridad.

Sí, los grabadores láser modernos son seguros para uso doméstico cuando se siguen las medidas de seguridad adecuadas. Esto incluye usar gafas protectoras, mantener una buena ventilación y seguir las instrucciones del fabricante.

El grabado láser marca o quema la superficie del material, mientras que el corte láser lo atraviesa completamente. Ambos procesos usan el mismo haz, pero con configuraciones de potencia y velocidad diferentes.

Los grabadores de diodo suelen no ser capaces de grabar metal directamente. Para trabajar con metales se recomienda un láser de fibra o aplicar recubrimientos especiales con un láser CO2 de alta potencia.

Depende del tipo de proyectos que vayas a realizar. Para pequeñas manualidades basta un área de 20x20 cm, mientras que para proyectos profesionales o industriales conviene un área de trabajo de más de 40x40 cm.

Los factores principales a considerar son: potencia del láser, área de trabajo, tipos de materiales que deseas grabar, precisión requerida, software compatible, medidas de seguridad incluidas y tu presupuesto.

Los láseres de diodo son generalmente más económicos y compactos, ideales para principiantes y uso doméstico. Los láseres CO2 son más potentes y precisos, mejor para uso profesional y pueden trabajar con más tipos de materiales.

Para principiantes, recomendamos un presupuesto entre 300€ y 800€. Esto te permitirá obtener un grabador láser de diodo de buena calidad con características básicas pero fiables.

Los modelos de diodo de bajo coste son ideales para empezar, ya que ofrecen facilidad de uso y seguridad. Marcas como Ortur o Atomstack cuentan con opciones muy recomendadas para iniciarse.

Para cortes efectivos en madera de hasta 5 mm, se recomienda al menos un láser de 20W ópticos. Para grosores superiores es más eficiente un láser CO2 de mayor potencia.

Los domésticos son más compactos, baratos y con menor potencia, adecuados para hobbies. Los profesionales ofrecen mayor área de trabajo, más horas de vida útil y compatibilidad con materiales industriales.

La mayoría de los grabadores láser son compatibles con software como LaserGRBL (gratuito) o LightBurn (de pago). El software específico dependerá del modelo de tu grabador.

El mantenimiento básico incluye: limpieza regular de los componentes ópticos, lubricación de las partes móviles, verificación de la alineación del láser y mantener el área de trabajo limpia. Se recomienda seguir el manual de mantenimiento específico de tu modelo.

La vida útil de un módulo láser típicamente es de 10,000 a 20,000 horas de uso, dependiendo de la calidad del láser y el mantenimiento adecuado. Con un uso y mantenimiento apropiados, puede durar varios años.

Para mejorar la precisión es importante mantener la máquina nivelada, asegurar la correcta alineación del láser, utilizar configuraciones de software adecuadas y realizar un enfoque exacto en cada proyecto.

Se recomienda ventilar el área, usar gafas de protección específicas para la longitud de onda del láser y evitar grabar materiales tóxicos como PVC o plásticos con cloro.

Realiza limpiezas periódicas, evita sobrecargar el láser con trabajos de larga duración sin pausas y utiliza voltajes estables para prevenir daños en la fuente de alimentación.